En juicio político el derecho no prospera. La defensa de Leopoldo López intentó revertir las acusaciones de la Fiscalía, pero sabía que lo vivido el miércoles y el jueves en la madrugada no fue una audiencia sino una “simulación”. La audiencia, para determinar sí iba a juicio, asegura, estuvo llena de irregularidades: desde los testigos hasta las presiones del Ministerio Público a última hora se dieron para anunciar una decisión cantada.
El abogado Roberto Marrero indicó que enjuiciarán a los estudiantes Christian Holdack y Marco Coello detrás de las rejas para justificar la imputación del delito de asociación al coordinador nacional de Voluntad Popular.
“Ninguno conocía a López antes de este proceso; no están inscritos en el registro electoral, no votan, no militan en ningún partido y los quieren acusar de asociación”, señaló. López ni siquiera pudo sentarse cerca de sus defensores porque en un momento en que vio el celular del abogado Bernardo Pulido, guardias nacionales corrieron a separarlos, aseguró una fuente.
Simulación de juicio
Aseguró que los testigos de la defensa no fueron tomados en cuenta por la jueza, que no aceptó el testimonio de camarógrafos ni de periodistas de varios medios que cubrieron el 12-F; pero sí escuchó a funcionarios del Cicpc que cuentan cómo detuvieron a López. “¿Cómo lo aprehendieron si se entregó voluntariamente ante la GNB? Eso no fue un juicio, fue una simulación. No aceptaron pruebas, no hubo debate, nos negaron todos los testigos porque, según ellos, no hacían falta porque había cámaras y videos que demostraban todo. Pedimos verificar quién grabó esos videos y nos ignoraron”, agregó. La defensa denunció que 9 de cada 10 testigos (90%) eran funcionarios del Estado que la Fiscalía considera víctimas.
La incoherencia
Otro elemento clave en la decisión de la jueza fue el análisis semiológico del discurso de López en la movilización del 12-F hecho por 2 figuras ligadas al oficialismo: Rosa Amelia Asuaje de León, filóloga y articulista de Aporrea, y Mariano Alfonso, que fue viceministro de Gestión Comunicacional e integrante de Periodistas por la Verdad. Concluyeron que López envió un mensaje “subliminal” para incitar a la violencia.
“La señora es experta en griego, ¡pero es que Leopoldo no habla griego! Al parecer Leopoldo dice una cosa y logra que la gente haga otra. Cuando dice ‘fuerza y fe’, al parecer la f es de fuego; vayan y echen fuego”, dijo Marrero.
Cambio
A las 7:00 de la noche del miércoles la Fiscalía hizo un cambio de fondo, prohibido en una audiencia: la propia Fiscalía y el Cicpc dejaron de ser víctimas y colocaron a la colectividad.
Voluntad Popular convocó a una concentración el domingo, a partir de las 10:00 am en la plaza Brión de Chacaíto, para proponer la vía para el cambio de régimen, informó Freddy Guevara.
Fuentes políticas aseguran que propondrán una constituyente o la renuncia del presidente.
López lamenta a través de una carta que la jueza Adriana López “vendiera su conciencia” al gobierno. A Nicolás Maduro le expresa: “Tienen razón en tenernos miedo. Unidos lograremos la derrota de la dictadura”.
La defensa introducirá un recurso de apelación el miércoles y estudia si es necesario presentar un amparo ante la Sala Constitucional, como también una solicitud de avocamiento ante la Sala de Casación Penal. Calculan que el juicio contra López comenzará a finales de agosto.
Estudiantes
En los casi cuatro meses de reclusión que llevan los estudiantes Marco Coello y Christian Holdack en la sede de Polichacao han recibido hasta dos veces por semana la visita de defensores públicos para ofrecerles sus servicios. Doris Morillo de Coello, madre de Marco, denunció que “los defensores públicos les decían claramente que les iría mejor si revocaban la defensa privada, pues de lo contrario quedarían, como efectivamente ocurrió, privados de libertad”.
A saber, Coello sufre de estrés postraumático por las torturas que sufrió al momento de su aprehensión. Sin embargo, los cuatro informes de psicólogos privados y del Estado fueron desestimados por el tribunal, que instó a que les siguieran dando el tratamiento médico y psicológico en el lugar de reclusión, reseñó el portal del diario El Nacional.