Los recortes de divisas vienen por todos lados, el caso de estudiantes en el extranjero es bastante sonado, jóvenes que se quedan «a las buenas de Dios» en un país que no es el de ellos, esperando a que Cencoex (o el anterior Cadivi), les envíe las remesas necesarias para subsistir. Sin embargo, ahora se le suma una raya más al tigre, y no nos referimos con esto a la reducción del cupo viajero, que ha sido la última noticia de estos días, no, nos referimos a algo más: las remesas de los jubilados en el exterior, también han sido suspendidas.
Aunque no hay un pronunciamiento oficial, ya son muchos los casos de jubilados que viven fuera del país que han tenido inconvenientes a la hora de recibir sus remesas, y en los últimos días esta problemática se ha acentuado. El portal RunRun.es, recoge varios testimonios que lo demuestran.
Desde el año 2008 Miguel Megías, profesor jubilado de la Universidad de Carabobo, recibía cada seis meses su pago, lo que le permitía costear su vida en las Islas Canarias. Sin embargo, a partir del segundo semestre de 2014 no le volvió a llegar la remesa. Contó que su solicitud ante el Centro Nacional de Comercio Exterior fue negada porque vino a Venezuela a visitar a su familia.
En igual situación se encuentran cientos de jubilados y pensionados que trabajaron en empresas públicas y privadas del país que ahora viven en el extranjero. También les ocurre a los estudiantes.
Megías refirió que durante cinco meses su solicitud se mantuvo en el estatus “Solicitud en Análisis”, cuando antes le daban respuesta a más tardar en cinco semanas. En enero pasado, le apareció “Negada por la Coordinadora de Casos Especiales”.
La explicación que le dieron fue: “La Comisión de Administración de Divisas considera no procedente la solicitud de autorización de adquisición de divisas, por cuanto no cumple con lo que establece el artículo Nro. 1 de la providencia 019. El sujeto reconocido por la norma como beneficiario, está referido a una persona que se encuentre fuera de Venezuela, es decir, cuya permanencia física sea en el exterior”.
El profesor indicó que en años anteriores viajó a Venezuela a visitar a familiares y eso no fue motivo de negación de la solicitud. Aclaró que la providencia no establece que no se puede regresar al país.
Agregó que igual respuesta recibieron otros de sus amigos docentes residenciados en Italia, España y Panamá. “Es una pena que después de tantos años de trabajo a nuestra edad tengamos que estar mendigando que nos envíen nuestros sueldos”, expresó.
René Dorta vive una situación similar. Después de siete meses en “análisis”, hace un par de días, su solicitud fue “Negada por la Coordinadora de Casos Especiales”. Sin embargo, a diferencia de Megías tiene año y medio sin salir de Panamá y todos sus recaudos están en orden. Informó que han constituido una Asociación de Jubilados en el Exterior y redactaron un reclamo que introducirá una comisión ante el Cencoex.
Con información de RunRun.es