Un turista holandés que se encontraba de vacaciones en una reserva natural de Sudáfrica vivió momentos de terror cuando fue al baño y una serpiente venenosa que estaba oculta dentro del inodoro lo atacó.
El animal le mordió los testículos, generando una necrosis en el zona y graves consecuencias de salud para el hombre.
Según lo reportado por Urology Case Reports, el hombre de 47 años fue mordido por una cobra hocicuda que estaba dentro del inodoro, tardó cerca de tres horas en ser trasladado en helicóptero a un hospital y recibió el antídoto cinco horas después de ser mordido.
El paciente fue diagnosticado con necrosis escrotal, lo que significa la muerte del tejido en la zona del escroto, por lo que fue necesario un aseo quirúrgico en los genitales para extirpar los tejidos dañados, así como tratamientos para controlar la fiebre, ocho dosis de antídoto contra veneno de serpiente y diálisis por los daños sufridos en los riñones.
Nueve días después, el hombre fue llevado a un hospital en Países Bajos, dónde los médicos documentaron el caso para la revista médica en el que se aclaró que no presentó secuelas neurológicas, pero requirió hemodiálisis por lesión renal aguda y una cirugía estética en la que extrajeron un injerto de espesor total de la ingle y lo colocaron sobre el defecto del pene.
Se conoció que las heridas del paciente cicatrizaron bien y pudo continuar con su vida de manera normal.
Redacción Maduradas con información de Clarín.
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