Mientras en 2008 la producción de crudo en Venezuela estuvo en 3,26 millones de barriles diarios, al cierre del año pasado llegó a 2,89 millones por día. Y en lo que va de 2015, según la Organización de Países Exportadores de Petróleo, está en 2,72 millones.
Asimismo, analistas petroleros afirman que la industria no ha escapado de los problemas macroeconómicos que atraviesa el país. Agregando que pese a que se han anunciado nuevos planes de expansión con la participación de inversionistas extranjeros, hay una serie de factores que entorpecen la ejecución de los proyectos.
Este año la cantidad de barriles de crudo producidos por Petróleos de Venezuela aumentó con relación a 2014. Datos comerciales de la industria, basados en números oficiales, indican que entre enero del año pasado y mayo de 2015 la explotación subió en promedio 60.000 barriles diarios, sin embargo, la cifra es poco representativa para una empresa que no ha revertido su tendencia a la baja desde hace 7 años.
“Una cosa es firmar cartas de intención en las que se mencionan grandes cifras de dinero y otra es que se desarrollen los proyectos porque hay limitaciones para avanzar. Pdvsa también está afectada por el acceso inoportuno de divisas, por pagos retrasados a proveedores, falta de repuestos”, aseguró el economista y profesor universitario Orlando Ochoa.
El incremento de la producción registrado estos meses ha sido en crudos extrapesados, que pasaron de 950.000 barriles a 1,1 millón de barriles por día, la de crudo pesado se ha mantenido en 610.000 barriles promedio, pero los crudos ligeros y medianos han caído alrededor de 75.000 barriles para situarse en poco más de un millón de barriles por día.
“El aumento de la producción de crudo extrapesado es una buena noticia, pero significa que se necesita más crudo ligero y mediano para mejorarlo, y como esos están cayendo y, además, se usan para otros fines vemos como han tenido que importar crudo de Argelia o nafta de Estados Unidos para diluirlo”, afirmó.
Estas importaciones, añadió, afectan aún más las finanzas de la petrolera. Entre 2012 y 2014 la factura por ese concepto promedió casi 8 millardos de dólares, entre 40% y 50% más que el servicio de la deuda externa de Pdvsa, que también ha subido.
El economista y profesor universitario Luis Oliveros coincidió con Ochoa. Recordó que en 2006 la deuda financiera de Pdvsa fue de 2,9 millardos de dólares, hoy supera 48 millardos de dólares. “Como se le ha complicado seguir emitiendo bonos, entonces endeudó a Citgo; el problema es que el dinero no se usó para mejorar la producción. Por el contrario, a Pdvsa le creció la nomina y siguió siendo la caja chica del gobierno”, dijo.
La apreciación de los sindicatos sobre las actuales condiciones operacionales de la industria tampoco es favorable. Iván Freites, directivo de la Federación Única de Trabajadores Petroleros de Venezuela, indicó que las organizaciones obreras tienen sus propias cifras, proporcionadas por los trabajadores. “Lo que se observan es una brusca caída en todas sus actividades, producto de las malas decisiones gerenciales y la politización de Pdvsa”.
Francisco Luna, otro directivo de la Futvp, concordó con Ochoa y Freites. Refirió que la razón del descenso de la producción de algunos crudos es el cierre de numerosos pozos por falta de mantenimiento y repuestos.
Freites agregó que en la faja del Orinoco las cosas tampoco marchan bien porque las plantas mejoradoras, que transforman el petróleo extrapesado en crudo liviano, tienen problemas.
La actividad de refinación ha registrado también un retroceso importante ya que se procesan 517.000 barriles diarios menos que la capacidad instalada (1.293.000 barriles por día) en las 5 refinerías de Pdvsa en Venezuela. Por ejemplo, en Amuay con una capacidad de 640.000 barriles por día se refinan 350.000, añadieron.
Con información de El Nacional.