Durante la tarde de este domingo 10 de noviembre, poco después de que Evo Morales anunciara su renuncia a la Presidencia de Bolivia, manifestantes opositores a su régimen ingresaron a su vivienda en Cochabamba para destruir todas sus pertenencias.
Los ciudadanos rompieron objetos personales y rayaron las paredes con fuertes mensajes en su contra.
“Asesino”.
“Hijo de p*ta”, fueron algunas de las cosas escritas en los muros de la casa.
En un video compartido por redes sociales, se evidenció el estado en el que quedó la vivienda y algunos de los efectos personales de Morales, incluido un gimnasio personal.
El líder boliviano dejó su cargo, luego de recibir múltiples presiones en su contra, y tras perder el apoyo de las Fueras Armadas de Bolivia.