El expresidente uruguayo José Mujica terminó a finales de junio las 32 sesiones de radioterapia que requería como parte de su tratamiento contra el cáncer de esófago que padece; pero atraviesa por uno de los momentos más duros de la enfermedad, confirmó su esposa, Lucía Topolansky.
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“Está en el momento más difícil porque tiene el acumulado de toda la radiación y eso inflama el aparato digestivo. Como comemos por el esófago, desgraciadamente solo puede comer sopita, algún jugo y gelatina. Y los uruguayos estamos acostumbrados a prendernos al asado, al guiso, a otras cosas. Es penoso eso”, dijo Topolansky en una rueda de prensa.
Detalló que Mujica “está bien” de ánimo, aunque también enfrenta las bajas temperaturas del invierno.
Redacción Maduradas con información de Infobae.
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