En medio de la cuarentena establecida en el país como medida preventiva contra el coronavirus, que restringe la circulación en todo el territorio nacional, los venezolanos se han visto afectados por la escasez de gasolina, teniendo que pasar largas horas en cola para lograr surtirse del combustible.
En la estación de servicio El Cercado, a escasos metros de la entrada a Guarenas, denuncian por ejemplo que funcionarios de la Guardia Nacional Bolivariana (GNB) favorecen de forma arbitraria a quienes se encuentran en la fila, y deciden la cantidad de litros que recibirá cada vehículo.
«No importa que sea médico, señora, tiene que hacer su cola igualito que los demás», le dijo un teniente de la GNB a una mujer.
«Mi amor, yo tengo que atender en el hospital a pacientes que tienen ese virus por el que tú estás aquí afuera», respondió.
«Nada, señora, váyase a la cola. No va a pasar», reiteró el efectivo.
«Está bien. Tú mandas. La diferencia entre los dos es que yo tengo ética y si tú te enfermas y llegas al hospital igualito te voy a atender rápido para que no te compliques», refutó la médico.
«Yo no me voy a enfermar«, contestó con altanería el militar.
La conversación tuvo lugar a las 9:00 am. La mujer se retiró y no fue sino siete horas después que logró su cometido de obtener gasolina.
«A este échale 10 litros, a este otro le puedes poner 20 litros», se oye decir a los funcionarios.
Según denuncian, una de las colas está reservada para altos funcionarios militares, mientras que los favorecidos no siempre son quienes tienen urgencia por movilizarse.
«Allí hay amigos y gente que paga. Ya hubo problemas porque reclamamos», comentó un testigo.
«El salvoconducto te sirve para andar por las calles, pero no para echar gasolina», expresó uno de los militares a un sujeto de mediana edad que le mostró un récipe como muestra de que necesitaba trasladar a un familiarenfermo a una consulta médica.
«Haga su cola como todos los demás. Son órdenes y las órdenes hay que cumplirlas», expresó el militar.