Durante la audiencia del juicio oral y público por la muerte de la joven estudiante Geraldín Moreno, registrada el pasado 22 de febrero de 2014, durante las protestas antigubernamentales, declararon efectivos de la Guardia Nacional Bolivariana (GNB) involucrados en el hecho y alegaron que a su llegada en Tazajal no utilizaron armas de fuego sino “armamento dirigido a disuadir protestas”, con lo cual justifican el uso que le dieron a sus armas en aquella ocasión.
Recordemos que la joven estudiaba el quinto semestre de Citotecnología y miembro de la selección de fútbol en la Universidad Arturo Michelena y falleció a los tres días producto de un disparo de perdigón que recibió en el rostro.
El abogado Luis Armando Betancourt declaró a El Carabobeño y consideró que la nueva categorización de las armas de fuego buscaría consolidar la idea de que la GNB actuó apegada a la norma, por lo que analiza los testimonios.
En esta tercera audiencia rindieron declaraciones la capitán Lampe Ordóñez y los efectivos Chirinos Martínez y José Manuel Escalona. Los padres de Moreno, también se pronunciaron, la madre de la víctima, Rosa Orozco, recordó que “ellos reforzaron que para accionar un armamento dirigido a disuadir protestas se debe guardar entre 15 y 20 metros, apuntando siempre por debajo de la cintura. A Geraldín le dispararon a unos 15 centímetros”.
Por su parte, el director en aquel entonces del Hospital Metropolitano de Naguanagua, estado Carabobo, Eduardo Naranjo detalló las condiciones del ingreso, estado de salud y cuántos perdigones le fueron extraídos a Geraldín Moreno.
El juicio continuará el próximo viernes 11 de septiembre, se presume que en esta ocasión declararán otros guardias nacionales así como expertos en balística.
Información de El Venezolano.