La nueva acción de atropello contra los comerciantes del país emprendida este viernes por la Sundde causó desagrado e indignación entre los venezolanos, quienes rechazaron el decomiso de más de 4 millones de juguetes de Kreisel y la detención de dos de sus trabajadores.
A través del Twitter, los ciudadanos calificaron la acción de «vulgar robo» y denunciaron que el Gobierno pone en marcha un «Dakazo2» que terminará de quebrar la poca actividad comercial que subsiste en el país.
Además, recordaron que la empresa Kreisel tiene más de 35 años en el país, brindando empleos estables y seguros a decenas de trabajadores.