El presidente estadounidense, Joe Biden, irá junto a su esposa, Jill Biden, este jueves a Florida para visitar el lugar del derrumbe parcial de un edificio de 12 plantas de Surfside (Miami-Dade) que ha dejado al menos 11 fallecidos y 150 desaparecidos, confirmó este martes la Casa Blanca.
En su visita, Biden y la primera dama se reunirán con los miembros de los equipos de rescate y los familiares de las víctimas, indicó Jen Psaki, portavoz de la Casa Blanca, a los periodistas que acompañan al mandatario en un viaje a un acto político hoy en Wisconsin.
«Quieren agradecer los heroicos equipos de emergencia y a todos los que han trabajado sin descanso, y verse con las familias que se han visto obligados a pasar por esta terrible tragedia para ofrecerles consuelo a medida que las labores de búsqueda continúan», señaló la portavoz sobre los encuentros previstos por el mandatario.
Esta mañana, Biden había adelantado ya su intención de desplazarse al lugar de la tragedia ocurrida la pasada semana.
«Sí, eso espero. Tan pronto como podamos. Quizá tan pronto como el jueves», respondió el mandatario a las preguntas de si tiene planeado viajar a esa localidad al norte de Miami.
Psaki informó el lunes que se han enviado a la zona del suceso recursos de la Agencia Federal de Gestión de Emergencias (FEMA por sus siglas en inglés) y expertos de diversas agencias federales como la Administración de Seguridad y Salud (OSHA) o el FBI trabajan también para ayudar en el rescate y en el análisis de lo ocurrido.
El número de desaparecidos por el derrumbe se sitúa ahora en 150, mientras que los localizados con vida son 136, indicó este lunes la alcaldesa de Miami-Dade, Daniella Levine Cava, que prometió llegar «hasta al fondo» en la investigación para determinar las causas de esta tragedia que ha tocado a personas y familias de diversos países.
Por causas hasta ahora no determinadas, el ala noreste del edificio Champlain Towers, inaugurado en 1981 y con un total de 136 apartamentos, se derrumbó en segundos a la 1.30 horas de la mañana (6.30 GMT) del jueves 24 de junio, cuando sus habitantes dormían.
La mayoría de las víctimas mortales identificadas hasta ahora tenían origen hispano, como muchos de los rescatistas, entre los que hay equipos llegados de otras zonas de EE.UU. y también de países como México e Israel.
Información de EFE.