Unos turistas que hacían un safari en el parque Nacional Kruger de Sudáfrica se llevaron el impacto de su vida.
Todo transcurría de lo más relajado, cuando de repente un león se les acerca a su coche y empieza a mordisquear el retrovisor.
El animal puso sus enormes patas sobre una de las ventanas del vehículo como haciendo un gesto de «saludo».
La temible, pero a la vez tierna imagen, fue grabada y enseguida se hizo viral.