El guionista y productor de Los Simpson, Mike Reiss, contó cómo fue su experiencia hace un año cuando bajó a las profundidades del océano en una expedición a bordo del Titán, mismo submarino que provocó la muerte de cinco tripulantes que descendieron el pasado domingo 18 de junio al Atlántico Norte.
“Recuerdo haber visto la palabra ‘muerte’ al menos tres veces en solo la primera página del contrato”, contó.
En principio, Reiss planeaba hacer el viaje con su esposa Denise, pero fue diagnosticada con covid-19 poco antes de iniciar el viaje, por lo que debió quedarse en la embarcación principal. “Recuerdo poder ver por dónde viajaba la nave a través de un mapa digital y creo que el centro de control podría comunicarse con el capitán del sumergible”, contó la mujer.
Según comentó el escritor estadounidense, la nave era del tamaño de una camioneta pequeña y no había muebles, solo una alfombra, mientras que las paredes eran curvadas. “Aunque descendimos a las aguas más profundas, nunca sentí temor, ni un cambio de presión”, señaló.
Tras conocer el caso de la desaparición del Titán en su más reciente expedición, la pareja siguió los esfuerzos de búsqueda de los equipos rescatistas, al igual que el resto del mundo. Aseguraron que conocían a al menos dos de los tripulantes.
“Recuerdo que el primer segundo que escuché sobre eso me dio una sensación escalofriante, solo sabía que era nuestro sumergible, no sabía que Stockton (Rush) estaba a bordo, eso fue otro shock más tarde”, sostuvo Denise.
Además de Rush, quien era director ejecutivo de OceanGate, perdieron la vida el empresario británico Hamish Harding, Shahzada Dawood y su hijo Suleman, y el exoficial de la marina francesa, Paul-Henry Nargeolet.