Durante una protesta realizada este jueves 29 de agosto en las adyacencias del Hospital Vargas de Caracas, una enfermera se quejó de la precaria situación económica que viven los profesionales de la salud del centro médico y de las condiciones del mismo.
Aseveró que su sueldo no le alcanza para cubrir sus necesidades de vestimenta y que, con esfuerzo, puede alimentarse.
«No tengo dinero para comprarme uniformes, unos uniformes que cuestan entre Bs. 400.000 a Bs. 500.000. Nosotros no ganamos ni siquiera para comprarnos un par de medias. Apenas nos alcanza para medio comer», expresó la mujer.
Manifestó que el hospital carece de insumos para realizar limpieza ni para atender a los pacientes sin incurrir en riesgos para los mismos enfermeros y demás empleados del lugar.
«Aquí no tenemos para limpiar, no tenemos para protegernos, no tenemos ni siquiera guantes, ni para pasar una mopa. Estamos limpiando con pura agua. Estamos propensos a contagiarnos con algo y llevarnos alguna bacteria en nuestros uniformes porque a veces no tenemos ni jabón, ni agua», añadió.