El portal Argus Media alertó que se estaría gestando otra catástrofe ambiental potencial frente a la costa de Venezuela donde un petrolero de almacenamiento flotantes está a punto de hundirse con un cargamento de 1.2 millones de barriles de crudo.
Se trata del buque Nabarima, con bandera venezolana, que está amarrado en el campo Corocoro en el golfo de Paria, y se inclina a estribor, inundando la sala de máquinas y los compartimientos cercanos.
Así lo habrían informado tres empleados venezolanos de la empresa PetroSucre que opera en el campo.
De acuerdo con el medio, los niveles de agua en los compartimientos de la embarcación llegan hasta 1.52 metros de profundidad y mantienen tendencia a aumentar a pesar de que los trabajadores intentan bombearla para reparar las fugas.
«La sala de máquinas está tan inundada que no hay posibilidad de que Nabarima pueda navegar por sus propios medios hasta una terminal para descargar el petróleo«, alertó uno de los trabajadores a Argus Media.
El Nabarima es un pequeño VLCC construido en 2005, que ha permanecido desde hace más de cinco años amarrado en el campo Corocoro, según la información del Ministerio de Petróleo.
Supuestamente el equipo de la embarcación fue sufriendo daños debido al contrato de personal no calificado por parte de la empresa cuando los trabajadores con experiencia iban dejando sus cargos.
Redacción Maduradas con información de Argus Media.
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