Dos suicidas del grupo Estado Islámico (EI) se inmolaron este jueves 21 de enero en un mercado del centro de Bagdad, matando a 32 personas y causando más de un centenar de heridos, en el atentado más sangriento en más de tres años en la capital iraquí.
El atentado se produjo en un mercado de ropa de segunda mano en la plaza Tayaran, un punto muy concurrido de Bagdad. En esa misma plaza, un atentado suicida se cobró la vida de 31 personas hace tres años.
Según explicó el ministerio de Interior a la AFP, un hombre activó su cinturón de explosivos en medio de la plaza, y cuando una multitud se acercó al lugar para socorrer a las víctimas, un segundo suicida detonó sus explosivos.
El último balance comunicado por el ministro de Salud, Hasan al Tamimi, da cuenta de 32 fallecidos y 110 heridos.
Desde la mañana, el ministerio de Salud puso en alerta máxima al conjunto del personal médico de la capital, de 10 millones de habitantes.
El lugar quedó lleno de charcos de sangre y pedazos de ropa, constató un fotógrafo de la AFP.
El acceso a la plaza quedó bloqueado por varios soldados para facilitar el trabajo del personal sanitario, que socorrió a los heridos allí mismo, en medio del ensordecedor ruido de las sirenas.
Al lugar acudieron rápidamente numerosas ambulancias, observaron periodistas de la AFP.