Estados Unidos incluyó a Saab, hace un tiempo, en la llamada ‘Lista Clinton’, y pesaba sobre él una circular azul que se habría hecho efectiva en ese país.
La Oficina de Control de Activos Extranjeros del Departamento del Tesoro de los Estados Unidos incluyó en su lista negra a Saab el 25 de julio de 2019 por su presunta participación en una red de corrupción a gran escala para obtener valiosos contratos comerciales con el régimen socialista.
El empresario obtuvo contratos sobrevalorados relacionados con el Comité Local de Abastecimiento y Producción sin licitación con figuras de alto rango a través de un conglomerado de empresas de maletín.
Carlos Paparoni, diputado a la Asamblea Nacional, aseguró el año pasado que entre 2010 y 2019 Saab recibió contratos por más de 25.000 millones de dólares de diferentes sectores del país. Además de la alimentación, también hubo negocios con oro, petróleo, medicinas, construcción y otros, según señaló el parlamentario.
La Fiscalía colombiana impuso el martes 9 de junio medidas cautelares con fines de extinción de dominio a bienes del empresario, que están avaluados en 35.000 millones de dólares y se ubican en Barranquilla.
Entre las propiedades confiscadas está una mansión avaluada en 28.000 millones de pesos en el sector de Riomar, dos lotes, una casa, un apartamento y tres garajes.
Saab tiene una orden de captura de la Interpol y las autoridades lo investigan por lavado de activos, concierto para delinquir, enriquecimiento ilícito, exportación y/o importaciones ficticias y estafa.