Este miércoles 13 de marzo el expresidente de Bolivia, Evo Morales, expresó su respaldo a la administración de Nicolás Maduro en Venezuela, en medio de la escalada diplomática con el gobierno argentino de Javier Milei.
“El gobierno de Javier Milei entregó a EEUU el avión B-747 de Emtrasur de propiedad del pueblo venezolano que se encontraba retenido ilegalmente en Argentina. EEUU vandalizó y desguazó ese avión”, comenzó Morales su mensaje en su cuenta en la red social X.
El régimen venezolano reafirmó el martes su decisión de vetar el espacio aéreo argentino hasta que se «compensen los daños» derivados de la incautación de un avión de la compañía estatal Conviasa, que estuvo retenido en Buenos Aires desde junio de 2022 y fue enviado a Estados Unidos en febrero pasado.
“Ninguna aeronave, que provenga o se dirija a la Argentina, podrá sobrevolar nuestro territorio, hasta que nuestra empresa sea debidamente compensada por los daños causados, después de las acciones ilegales realizadas, solo con el fin de complacer a sus tutores del norte”, expresó en X el canciller venezolano, Yván Gil.
Esta medida provocó la reacción del portavoz presidencial argentino, Manuel Adorni, quien, durante su conferencia de prensa habitual en la Casa Rosada, afirmó que su país “no se va a dejar extorsionar por los amigos del terrorismo”.
Según Gil, con estas palabras, el Ejecutivo de Javier Milei “pretende desconocer las consecuencias de sus actos de piratería y robo contra Venezuela, las cuales fueron advertidas en reiteradas ocasiones antes del acto delictivo cometido contra Emtrasur”, la filial de Conviasa a la que pertenecía la aeronave incautada.
“El gobierno neonazi de Argentina no solo es sumiso y obediente con su amo imperial, sino que tiene un vocero ‘cara de tabla’, el señor Manuel Adorni”, agregó el canciller venezolano.
Buenos Aires anunció el inicio de “acciones diplomáticas contra el Gobierno de Venezuela, encabezado por el dictador Maduro”, contemplando incluso la posibilidad de presentar una denuncia ante la Organización de Aviación Civil Internacional (OACI) por “violar el Convenio sobre Aviación Civil Internacional”, conocido como el Convenio de Chicago (1944).
La notificación del veto fue realizada por fuentes oficiales argentinas, sin obtener una respuesta inmediata de Venezuela. El canciller venezolano se pronunció posteriormente en las redes sociales.
En la madrugada del 12 de febrero pasado, el Boeing 747-300M Dreamliner de carga, anteriormente propiedad de la empresa iraní Mahan Air y actualmente en posesión de Conviasa (ambas sancionadas por el Departamento del Tesoro de Estados Unidos), partió hacia Estados Unidos en respuesta a una solicitud de decomiso.
Dos semanas después de la salida del avión de Argentina, el 29 de febrero, Maduro acusó a Estados Unidos de cometer un “acto vil, criminal, indignante” al «descuartizar» la aeronave en Miami.