Un video difundido por la red social china Weibo y protagonizado por trabajadores de una funeraria en Shanghái se hizo viral en todo el mundo.
Resulta que un anciano había sido declarado muerte por error y era transportado en una bolsa de cadáveres. En el camino al carro fúnebre, cuando iba a ser trasladado desde una residencia de ancianos para ser incinerado, el señor comenzó a moverse.
La escena impactó a uno de los operarios, quien comenzó a gritar: «¡Vivo! ¿Viste eso? ¡Está vivo!». Entretanto, su compañero respondió: «¡No lo cubras de nuevo!».
El director de la residencia de ancianos y el médico que certificó el deceso fueron despedidos. Por otra parte, la funeraria recompensó a cada uno de los trabajadores que se percataron de que el anciano seguía con vida con un bono de 5.000 yuanes (720 euros).
Se conoció que el anciano estaba estable y en recuperación. Inicialmente, no se supo si estaba contagiado por COVID-19.