Vecinos de la parroquia La Candelaria de Caracas protestaron este 29 de noviembre para denunciar que los alrededores de la iglesia de La Candelaria han sido utilizados como un “depósito de excremento y basura”.
“¡La tiranía pisotea nuestro patrimonio histórico!”, tuiteó el periodista Carlos Julio Rojas.
Asimismo, responsabilizaron a Érika Farías, alcaldesa del municipio Libertador designada por el régimen, de permitir que este recinto se encuentra en estas condiciones.
Por último, exigieron a la alcaldía que tome las acciones pertinentes para limpiar estos espacios y así eliminar el “olor nauseabundo” que generan tanto en la iglesia como en la plaza Candelaria.