El papa Francisco nombró al reconocido cardenal venezolano, Baltazar Enrique Porras Cardozo, como el presidente delegado del Sínodo para la Amazonía que se celebrará en la Ciudad del Vaticano del 6 al 27 del próximo mes de octubre.
El pasado 15 de octubre de 2017, el Santo Padre convocó una Asamblea Sinodal Especial sobre la Panamazonía, y señaló que el objetivo fundamental de ese encuentor era encontrar «nuevos caminos» para la evangelización de aquella porción del Pueblo de Dios (los indígenas) de quienes dijo, eran muchas veces «olvidados y sin una perspectiva de un futuro sereno».
En esa ocasión, el Papa también se refirió a la crisis de la foresta amazónica, pulmón de fundamental importancia para nuestro planeta.
El Sínodo Amazónico es un proyecto eclesial, cívico y ecológico que aspira superar los confines y redefinir las líneas pastorales, adecuándolas a los tiempos contemporáneos.
Brasil, Bolivia, Colombia, Ecuador, Perú, Venezuela, Suriname, Guayana y la Guayana Francesa son los nueve países que integran la Panamazonía, y se trata de una región con una importante fuente de oxígeno para toda la tierra, en la que se se concentran más de un tercio de las reservas forestales primarias del mundo.
Baltazar Porras destacó que los mencionados nueve países aun no han tenido el protagonismo que les corresponde, lo que puede ser síntoma claro de que ”otros intereses juegan a fomentar esta destrucción para otros fines”.
”Estamos ante un problema que va más allá del hábitat, del ambiente físico. La destrucción es ‘integral’: el territorio, las especies vegetales y animales, los habitantes, campesinos, pueblos originarios en un espacio devastado por la mano del hombre, causa primera de este desastre. Intereses económicos y políticos, urgidos de un inmediatismo rentista que convierte en botín de guerra la casa común”, alertó el Cardenal.