Los bolivianos comenzaron este domingo 20 de octubre a votar en una jornada electoral en la que decidirán si prolongan hasta 2025 el mandato de Evo Morales, en el poder desde hace 13 años, u optan por cambiar a su primer presidente indígena de izquierdas.
En la votación, que arrancó en todo el país a las 08H00 locales (12H00 GMT) y se extenderá por ocho horas, Morales parte como favorito por un estrecho margen frente a su principal rival, el expresidente Carlos Mesa, según las encuestas.
Morales viene precedido de sus logros sociales y económicos pero también salpicado por escándalos de corrupción y acusaciones de tomar una deriva autoritaria. A diferencia de las tres últimas elecciones desde 2006, esta vez no está cantada una victoria abrumadora para él en primera vuelta.
Tras votar en su reducto cocalero del Chapare, el mandatario expresó su «confianza» y optimismo.
«Acabo de sufragar, como me corresponde, y aprovecho esta oportunidad para convocar al pueblo boliviano a participar en esta fiesta democrática«, agregó.
Un sondeo de la universidad estatal le da 32,3% de las preferencias a Morales y 27% a Mesa, lo cual obligaría al mandatario con más tiempo en ejercicio en América Latina a ir a una inédita segunda vuelta.
Mesa es el único candidato de los ocho aspirantes opositores a la presidencia que puede hacer tropezar al mandatario. Y parte de la oposición llama a los votantes a un «voto castigo» contra Morales, que por su lado confía en el «voto seguro» de sus filas.
La decisión de Morales de postularse para un cuarto mandato es fuertemente criticada por la oposición, que cree que el país podría caer en la autocracia.
Los 7,3 millones de votantes bolivianos eligen, además de presidente y vicepresidente, sus 166 parlamentarios.
Redacción Maduradas con información de AFP
También puede leer: