El presidente interino Juan Guaidó se refirió, este martes, a la grave crisis humanitaria que se vive en el país y ratificó su lucha para lograr un cambio en Venezuela.
Guaidó, durante una reunión en la Comisión Delegada de la Asamblea Nacional, manifestó que el país está a las puertas de una catástrofe humanitaria: “Hoy en Venezuela enfermarse es una sentencia de muerte”.
“Vamos a hacer todo lo que esté a nuestro alcance para ponerle fin, a que no sea una hazaña montarse en el Metro, agua, eso es un sueño, bañarse con agua caliente es una ilusión, un lujo , en Maracaibo y en Caracas están cobrando hasta 200 dólares por una cisterna; electricidad hemos retrocedido a 1914 a cocinar con leña”, dijo.
Agregó: “No nos vamos a acostumbrar a esta tragedia, ese es el rol de este Parlamento, y por eso sesionamos de manera extraordinaria, y por eso insistimos con la crisis humanitaria y vamos a insistir en su ingreso, también en el canal. La misma ONU reconoció que con el plan que tienen avanzado, que hemos trabajado en conjunto, solamente pudieron atender a 2 millones 300 mil venezolanos, de 7 millones, por eso la necesidad del canal humanitario, de que cese la usurpación».