El 10 de febrero de 2014, el presidente de la Asamblea Nacional, Diosdado Cabello, estrenó su programa televisivo Con el mazo dando, que transmite el canal estatal Venezolana de Televisión, publica TalCual.
Las acusaciones hechas por supuestos anónimos, llamados «patriotas cooperantes», casualmente han hecho que varios opositores paren en la cárcel.
El 27 de enero de 2015, Cabello fue señalado de supuestamente liderar el presunto «cartel de los soles». El diario español ABC publicó «declaraciones» de Leamsy Salazar, antiguo escolta del fallecido presidente Hugo Chávez.
Señalaría a la DEA de Estados Unidos que el primer vicepresidente del Partido Socialista Unido de Venezuela es «narcotraficante».
El diputado se sintió ofendido y demandó a TalCual, El Nacional y La Patilla por replicar esa información. El Juzgado 12 de Control admitió el recurso el 21 de abril.
El jefe del Parlamento se aferra al artículo 442 del Código Penal Venezolano, declarándose víctima.
«Es sujeto pasivo del Delito de Difamación Agravada Continuada, según los términos establecidos por el artículo 120 del Código Orgánico Procesal Penal, por ser la persona sobre la que recaen las dolosas imputaciones que ciertamente lesionan en forma directa su reputación y honor», se lee en el acta de la demanda.
La familia de José Alejandro Márquez no contó con la suerte de Cabello.
Es impensable que el dirigente chavista sea demandado por difamar. El ingeniero fue una de las primeras víctimas de los «mazazos».