Al conocer la elección de su país, el presidente venezolano declaró que “Venezuela va desde el 1ro. enero de 2015 a ser una voz independiente. No vamos a recibir órdenes de nadie y aquel que se siente en ese escaño, que será revolucionario y chavista, enviará nuestro mensaje de paz”. Con 181 a favor de 193 posibles, Venezuela logró el jueves por quinta vez un asiento no permanente en el Consejo de Seguridad de las Naciones Unidas para el período 2015-2016. “Venezuela no obtuvo una victoria particular ni nada que se le parezca. En los próximos dos años tiene que respetar [los principios] para los que fue elegido. No puede usar [su asiento] para intereses particulares”, afirmó Carlos Romero, especialista en temas internacionales.
Romero comentó al Diario Las Américas que, ante esta situación, es necesario estar alerta para que el Gobierno socialista de Maduro no viole la esencia real de lo que significa obtener esa posición y entienda la verdadera función para la cual fue elegido: representar a América Latina y el Caribe.
Romero también resaltó que “Venezuela no tuvo contendiente para representar a América Latina y el Caribe y eso le aseguró un camino muy fácil para ganar”. Indicó que las primeras declaraciones del canciller venezolano, Rafael Ramírez, fueron muy preocupantes por hacer promoción de una “victoria” que está muy lejos de ser como él la describe.
Las contradicciones
Para Romero, el Gobierno de Nicolás Maduro tiene una “actitud distante con la ONU, pues rechaza sus consideraciones sobre los casos de los opositores Leopoldo López y Daniel Ceballos”.
La resolución del Grupo de Trabajo sobre Detenciones Arbitrarias de la ONU ordenó la liberación de ambos líderes opositores.
Al conocer la elección de su país, el presidente venezolano Nicolás Maduro declaró que “Venezuela va desde el 1ro. enero de 2015 a ser una voz independiente. No vamos a recibir órdenes de nadie y aquel que se siente en ese escaño, que será revolucionario y chavista, enviará nuestro mensaje de paz”. Esa declaración, según Romero, es “muy delicada”.
Durante una rueda de prensa en la ONU, Ramírez afirmó que la “victoria” de Venezuela evidencia el “apoyo internacional que tiene la revolución bolivariana como promotora de la paz, la justicia social y los derechos humanos”.
Emilio Figueredo, abogado y profesor de Derecho Internacional, Emilio Figueredo, afirmó en programas radiales y su cuenta Twitter que el “régimen pretende vender como victoria lo que es un hecho normal y rutinario en la ONU: la rotación de los países de cada grupo regional”.
Explicó que Venezuela “ganó ese puesto porque le correspondía a su turno” y no es más que una “crónica de una victoria anunciada. Estos son cuotas automáticas dentro de los grupos y le tocaba a Venezuela, eso fue todo. No es un reconocimiento a Venezuela sino un procedimiento normal interno en las Naciones Unidas”.
Agregó que los “candidatos únicos son presentados por un grupo regional, en este caso el Grulac, y siempre reciben aprobación unánime. No es triunfo particular del país sino cuota regional. Esto lo decidió el grupo”, subrayó.
Consideró que están tratando de lavarla la imagen al país sudamericano, que se encuentra “en una crisis económica y con muchos problemas sociales y políticos. Existe una manipulación de la información, pero sí hay que tener claro que [el Gobierno de Maduro] no ganó algo parecido al Miss Universo”.
Figueredo afirmó que “ningún Estado que pretenda ser democrático puede desconocer resoluciones sobre los Derechos Humanos que provengan de comisiones o grupo de trabajo de la ONU”, reseñó el portal de Actualidad Venezuela.