El Gobierno del presidente de EEUU, Joe Biden, se sumó este martes, 3 de septiembre, “a la creciente lista de aliados internacionales que condenan” la “orden de detención injustificada” contra el excandidato presidencial opositor Edmundo González Urrutia.
“En lugar de reconocer su derrota electoral y prepararse para una transición pacífica en Venezuela, Maduro ha ordenado ahora la detención del líder democrático que lo derrotó abrumadoramente en las urnas», así lo expresó Brian Nichols, subsecretario de Estado para Asuntos del Hemisferio Occidental de Estados Unidos, en su cuenta de X (Twitter).
«Edmundo González ha promovido la reconciliación nacional y nos sumamos a la creciente lista de socios internacionales que condenan esta orden de arresto injustificada», agregó.
La solicitud se hace después de que la Fiscalía citara a González Urrutia en tres ocasiones, y el opositor decidiera no presentarse, al desconocer en calidad de qué debía comparecer y al no reconocer los delitos que el Ministerio Público (MP) le atribuye.
Según un oficio con fecha de hoy del ente fiscal, al antichavista se le acusa también de “instigación a la desobediencia de leyes”, “conspiración”, “sabotaje a daños de sistemas y asociación (para delinquir)”.
La investigación a González Urrutia guarda relación con la publicación de una página web, en la que la principal coalición opositora —la Plataforma Unitaria Democrática (PUD)— asegura haber cargado “el 83,5 % de las actas electorales” recabadas por testigos y miembros de mesa la noche de la elección, para sustentar su denuncia de fraude en las presidenciales.
La PUD divulgó estas actas, que el Ejecutivo tacha de “falsas”, después de que el Consejo Nacional Electoral (CNE) proclamase como ganador de los comicios a Maduro, lo que ha sido cuestionado por numerosos países, algunos de los cuales respaldan que González Urrutia ganó por amplio margen.