Un joven venezolano, residente chileno desde hace un año, denunció un hecho irregular del que fue testigo cuando quiso viajar desde Chile hasta Cancún (México).
De acuerdo con su testimonio, a pesar tener todos sus papeles en regla y contar con una identificación chilena que lo acredita como ciudadano de Chile, en migraciones de México fue obligado a permanecer en una habitación con otros 69 venezolanos.
A través de un video compartido por redes sociales, el muchacho contó que la habitación no contaba con las condiciones necesarias para mantener a tantas personas encerradas a la espera, aparentemente, de ser deportadas.
Antes de encerrarlo, le pidieron que dejara su bolso de mano, su celular y toda su ropa, por lo que se quedó en ropa interior. Los niños y demás venezolanos que compartieron el encierro con él, estaban en las mismas condiciones que él.
«De repente, veo que había 10 niños, que los tenían en interiores. Me dijeron que los tenían detenidos y no sabían por qué«, expresó, con evidente indignación
En determinado momento, uno de los funcionarios que los tenían encerrados ingresó a la sala y, de forma burlesca, aseveró que la crisis en Venezuela no existe.
«El hombre nos dijo: ‘¿Quieren seguir pasando trabajo y necesidad? Allá en Venezuela no hay crisis, en Venezuela no hay hambre, hay comida y medicamentos’ Ya ahí yo estaba relacionando que era parte de la dictadura que vivimos», aseveró.
No fue sino cuando manifestó que era ciudadano chileno que, con renuencia, lo hicieron ingresar a un avión para regresar a Chile. Así mismo, le indicaron que no lo habían dejado entrar porque, a pesar de que tenía todos los documentos, no contaba con el “perfil” que buscaban para permitir el ingreso a México.
Del mismo modo, lo amenazaron con colocarle una «alerta migratoria» internacional si llegaba a contar lo que había presenciado.