Las protestas por el alza del precio del tiquete del Metro de Santiago se extendieron a lo largo de este viernes por toda la ciudad con destrozos y actos violentos en las calles, lo que motivó el cierre de todas las líneas del suburbano y dejó a miles de personas sin forma de movilizarse.
En el quinto día de protestas en varias estaciones del Metro, con centenares de jóvenes colándose sin pagar, causando destrozos y enfrentándose a la Policía. Los disturbios fueron en aumento hasta provocar el caos en varios puntos de la ciudad, entre los desórdenes y la masa de personas que quedó sin locomoción.
La céntrica Plaza Italia, lugar habitual de protestas sociales en Chile, tiene las calles cerradas al tráfico con barricadas de vallas metálicas y algunas hogueras.
La imagen se repite en varios puntos de la capital chilena, con destrozos en el mobiliario externo de las estaciones de metro y enfrentamientos con la Policía.
El ministro del Interior, Andrés Chadwick, tras una reunión de varias horas con el presidente de Chile, Sebastián Piñera, invocó a ley de seguridad del Estado, una legislación que regula los delitos contra la seguridad interior del país y que endurece las penas.
“Hemos invocado la Ley de Seguridad del Estado para quienes resulten culpables de causar daño en el Metro y su funcionamiento. Hemos presentado querellas por Ley de Seguridad del Estado que establece penas muy severas”, dijo Chadwick.