Un apretado encuentro entre los equipos Chicago Bulls y Los Angeles Lakers estuvo marcado no por la actuación de algunos de sus mejores jugadores, sino por la filtración en redes sociales de un video grabado en uno de los palcos del United Center, de un baile erótico en lo que habría sido una fiesta privada.
La celebración se llevó a cabo a pesar de las normas de la NBA, que prohíben explícitamente cualquier acto relacionado con actividad sexual o connotación similar.
Lo que llamó aún más la atención tanto del público presente en el estadio como de los internautas, es que la persona que alquiló la suite realizó la fiesta sin el consentimiento de la dirección de los Bulls ni de la liga. Asimismo, se desconoce cómo las mujeres que participaron en el baile llegaron al lugar.