El ministro de Asuntos Exteriores de Rusia, Serguéi Lavrov, advirtió este 5 de mayo que una intervención armada en Venezuela tendría «consecuencias catastróficas» para el sistema de seguridad internacional.
«Con nuestros socios venezolanos coincidimos en que todo empleo de la fuerza sin la aprobación del Consejo de Seguridad de la ONU puede tener consecuencias catastróficas para toda la seguridad internacional«, dijo Lavrov.
El jefe de la diplomacia rusa hizo esta afirmación en una rueda de prensa conjunta con el ministro de Asuntos Exteriores venezolano, Jorge Arreaza, al término de sus conversaciones.
«Confío en que los analistas que, seguramente, todavía quedan en Washington, calculen las consecuencias de acciones temerarias», subrayó Lavrov al comentar las declaraciones del secretario de Estado estadounidense, Mike Pompeo, acerca de que Washington no descarta la opción de una intervención militar en Venezuela.
El ministro ruso expresó su esperanza de las palabras de Pompeo «no reflejen las intenciones del presidente (de Estados Unidos, Donald) Trump».
«Por lo menos en la conversación telefónica (que Trump mantuvo este viernes) con el presidente (Vladímir Putin) no se manifestaron esos propósitos«, añadió.
Lavrov indicó que la crisis de Venezuela será precisamente uno de los temas que abordará este lunes 6 de mayo con Pompeo en la ciudad finlandesa de Rovianemi.
En su reunión con Arreaza, el ministro ruso condenó la «campaña» de Estados Unidos para derrocar al gobierno de Venezuela e instó a Washington a renunciar a «planes irresponsables» en relación a ese país.
«Llamamos a los estadounidenses y todos los que les apoyan a renunciar a planes irresponsable y a actuar exclusivamente en el marco del derecho internacional», dijo.
El jefe de la diplomacia rusa resaltó que los contactos permanentes entre Moscú y Caracas constituyen una «prueba de la solidez de hermandad» de los pueblos de ambos países y del propósito de sus líderes de fortalecer su asociación estratégica.
«Vemos hoy una campaña sin precedente encabezada por Estados Unidos para derrocar a las autoridades legítimas de Venezuela, y nosotros condenamos esta campaña, que trasgrede todas la normas del derecho internacional», agregó.
El ministro ruso indicó que es evidente que Washington apunta no solo contra Venezuela, sino que busca también «reformatear políticamente» América Latina, lo que es una «total falta de respeto» hacia sus pueblos.
Tras agradecer el «apoyo consecuente» de Rusia a Venezuela, Arreaza indicó que esta semana su país vivió «otro capítulo del golpe de Estado continuado», cuando «el mundo fue testigo de un llamamiento a un alzamiento, a una rebelión militar totalmente infructuosa, fracasada».
Según el ministro de Exteriores venezolano, dicho llamamiento «chocó con la dignidad de los venezolanos y del pueblo de Venezuela».
Sin embargo, agregó, «los voceros del gobierno de Washington no cesan en su empeño por forzar un cambio de gobierno en Venezuela por vías no legales».
«Nada ni nadie logrará que la soberanía nacional de Venezuela sea doblegada», subrayó.
Arreaza indicó que Nicolás Maduro «insiste en que el diálogo es la única opción».
«Nosotros creemos que el pueblo de Venezuela quiere diálogo, y Rusia nos está ayudando en la comunidad internacional para que haya diálogo», dijo.
Redacción Maduradas con información de EFE