El Índice Nacional de Precios al Consumidor de los últimos 12 meses se ubicó en 108% al cierre de mayo, según cifras extraoficiales.
El cálculo realizado por una empresa consultora de mercadeo también fue corroborado por otra fuente extraoficial cercana al Banco Central de Venezuela, publica el diario El Nacional.
El resultado contrasta con la inflación anualizada de los años anteriores para el mes de mayo. Si bien las estadísticas habían mostrado fuertes aceleraciones en los últimos años, nunca se había llegado a sobrepasar el umbral de los tres dígitos para una estadística que mide el comportamiento de los precios.
Muestra de ello es que para el cierre de mayo de 2014 el INPC anualizado experimentó una aceleración de 60,9%, según las cifras oficiales del ente emisor. Asimismo, el resultado para el mismo mes en 2013 mostró un salto de 35,2% en 12 meses. En lo que corresponde a los resultados para 2012, el ente emisor reportó una inflación anualizada de 22,6%.
Varias firmas internacionales han realizado cálculos sobre el comportamiento de los precios en Venezuela al cierre de este año. Recientemente HSBC aseguró que dentro de sus previsiones está 175%. Por su parte, Jefferies había alertado hace pocos días que la inflación se situaba por encima de 100%:
La firma JP Morgan en sus últimos cálculos aseguró que la inflación promedio anualizada de los meses abril, mayo y junio de 2015 versus 2014 es de 108,7%.
El BCV se ha negado a publicar las estadísticas de inflación y de escasez de 2015. Igualmente, hay retraso en la publicación de los informes financieros mensuales en los que aparece el balance del banco con el reporte de sus activos y pasivos. Existe preocupación porque es probable que parte de la caída en las reservas internacionales se deba a la baja en la cotización del oro y de allí que el ente emisor haya decidido retrasar su publicación.
Economistas han advertido que la opacidad en las cifras ha llegado a niveles alarmante. Es la primera vez que por órdenes del Ejecutivo el BCV, el Ministerio de Economía, Finanzas y Banca Pública, e incluso el Instituto Nacional de Estadísticas, se mantienen tanto tiempo sin dar a conocer los datos oficiales del comportamiento de la economía.