Las calles de Venezuela amanecieron, este viernes 28 de octubre, totalmente desoladas. El llamado a paro nacional convocado por la Mesa de la Unidad Democrática (MUD) fue acatado en gran parte del país.
Mediante las redes sociales llegan reportes y fotografías de cómo lucen las principales vías y sectores industriales de ciudades importantes del país, que no cuentan con el movimiento habitual de un viernes común.
La gran mayoría de venezolanos decidió quedarse en sus casas y así dar otra muestra contundente del rechazo hacia el Gobierno de Nicolás Maduro, a quien ni el aumento salarial decretado este jueves le funcionó para subir su popularidad.
En avenidas y autopistas, que en un día normal están colapsadas, este viernes puede jugarse un partido de fútbol si se quiere, están totalmente vacías. Paradas de autobuses y algunas unidades de transporte que están operativas se observan con pocos usuarios, cuando por lo general están abarrotadas.