Con desesperanza y preocupación los venezolanos recibieron la noticia del presidente Nicolàs Maduro de la entrada en vigencia de una «nueva etapa» del Sistema Dicom, que hará subastas de divisas dos veces a la semana.
El país esperaba modificaciones estructurales en el sistema cambiario que pudieran anticipar una leve mejoría en la economía del país, pero en lugar de eso, tuvieron que conformarse con el Dicom «reencauchado».
«Venezuela necesita un sistema de captación, uso, administración e inversión de divisas convertibles que permita darle fuerza a esta capacidad productiva que tiene el país (…) Busquemos la forma para que los venezolanos que tengan sus capitales en el exterior los traigan y los pongan a funcionar en la dinámica productiva creativa del país”, dijo.
Así reaccionaron los venezolanos al desesperanzador anuncio: