El presidente encargado de Venezuela, Juan Guaidó, junto a un grupo de diputados lograron ingresar al Palacio Federal Legislativo, sede de la Asamblea Nacional (AN) a pesar de los obstáculos impuestos por la Guardia Nacional Bolivariana (GNB).
«Estamos aquí para defender sus derechos. Los necesitamos a ustedes también. Acompáñennos en esta lucha», expresó el ratificado presidente de la AN en el Heciciclo de sesiones, donde se realizó la primera sesión del nuevo período legislativo 2020.
Tras el ingreso de los diputados democráticos a la AN, desde las afueras del Parlamento, reportaron ataques de grupos armados afines al régimen de Nicolás Maduro, mejor conocidos como colectivos.
El equipo de prensa del canal privado Venevisión denunció que fueron golpeados, y que parte de sus instrumentos de trabajo robados.
Más temprano, funcionarios de la GNB y otras fuerzas policiales «reguardaron» los alrededores de la AN, como ocurrió el pasado domingo 5 de enero, cuando se impidió la entrada a Guaidó para la sesión especial, en la cual finalmente en las instalaciones de El Nacional resultó ratificado en el cargo.
La GN cerró la puerta este del Palacio Federal Legislativo, donde se le informó a los parlamentarios que el ingreso era por la puerta oeste. Sin embargo, esta también fue cerrada.
Mientras, la fraudulenta junta directiva encabezada por Luis Parra tomó posesión de las curules de la presidencia de la AN, en un hemiciclo que solo contó con la presencia de diputados del Partido Socialista Unido de Venezuela (PSUV) y otros que se denominan de «oposición» (investigados por hechos de corrupción).
Todos se retiraron, tras el ingreso de los diputados, que apoyan a la directiva liderada por Guaidó.
La diputada Manuela Bolívar denunció, que en la sesión sin quórum de Parra, participaron supuestos milicianos chavistas para rellenar las curules vacías de los diputados, que para ese entonces no habían podido acceder al Palamento.
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