“Un compañero venezolano me avisaba cuando había una cama disponible y allí dormía”. Venezolanos en Dublín viajaron a Londres el pasado lunes donde solicitaron apoyo urgente para más de 108 estudiantes en Irlanda que no han recibido sus divisas correspondientes por concepto de manutención para gastos de estudios en el exterior, lo que los ha llevado a una situación económica crítica en la mayoría de los casos. Tras la infructuosa reunión con el cuerpo diplomático, decidieron protestar.
“Ni el Cencoex ni Cadivi ni las 75 embajadas y consulados en Europa que hemos contactado nos han dado respuesta”, declaró Carlos Indriago, ingeniero de sistemas egresado de la Universidad de Oriente, que elevó la voz de protesta en nombre de un centenar de estudiantes.
En el limbo
“Recaudamos entre la comunidad de venezolanos para poder trasladarnos a la embajada más cercana a Dublín, que es la de Londres, y tratar de conseguir una solución. No tenemos dinero ni para comer y la crisis de las aerolíneas en Venezuela hace imposible que podamos cambiar nuestro pasaje de regreso”, destacó Indriago.
Boris Maldonado, estudiante de Derecho de la Universidad Nacional Experimental del Táchira, viajó desde la ciudad San Cristóbal para hacer un curso de inglés. “Tengo mes y medio esperando respuesta de la segunda manutención de CADIVI (…) Me parece una irresponsabilidad del Gobierno no aprobar las divisas que nos corresponden”, fustigó.
Confesó que debido a la falta de dinero, no pudo seguir pagando el albergue donde se alojaba. “Un compañero venezolano me avisaba cuando había una cama disponible y allí dormía (…) He entregado entre 100 y 120 currículos para encontrar trabajo y poder mantenerme, pero no he obtenido respuesta”, manifestó.
Indriago informó que iniciaron la recaudación de comida no perecedera, calzado y vestimenta en un popular restaurante venezolano en Dublín, para asistir a los estudiantes más necesitados. Sostiene que continuarán las gestiones hasta conseguir regularizar la situación económica de los afectados.
Reseña Carlos Indriago.