Venezuela aseguró este martes 31 de octubre que Guyana pidió a la Corte Internacional de Justicia la suspensión del referendo consultivo del 3 de diciembre sobre la disputa que ambas naciones sostienen por un territorio de casi 160.000 kilómetros cuadrados, una acción que, consideró, violenta la soberanía venezolana.
«El día de ayer la República Cooperativa de Guyana se dirigió ante la Corte Internacional de Justicia para pedir medidas provisionales; pide a la Corte que no proceda el referendo consultivo previsto en Venezuela el 3 de diciembre», dijo en declaraciones a la prensa la vicepresidenta ejecutiva, Delcy Rodríguez.
Para el régimen venezolano, la solicitud hecha por Guyana a la CIJ, que el pasado abril declaró que tiene jurisdicción para pronunciarse sobre esta disputa, es una «grosería» que contraviene la Constitución y todo el ordenamiento legal interno.
«Lo que ha pedido Guyana es un exabrupto. Pedirle a Venezuela que derogue forzosamente su orden constitucional, lo cual no va a ocurrir, es una barbarie, es un signo de desesperación de ese Gobierno», aseveró.
Ante la solicitud, Rodríguez remarcó que Venezuela celebrará esta consulta popular, tal como está previsto, para el 3 de diciembre, e insistió en que no caerán en las «provocaciones» de Guyana.
«No provoquen a Venezuela, no la provoquen porque somos una nación de paz, somos una nación que enarbola siempre su Constitución (…) para defenderse (…) pero también sabemos defendernos en todos los ámbitos y campos. Eso debe estar muy claro, que nosotros vamos a defender nuestros derechos sobre la Guayana Esequiba», afirmó.
El Consejo Nacional Electoral indicó que un total de 20.694.124 ciudadanos están habilitados para votar en el referendo, que no es vinculante, sino que únicamente servirá para que los ciudadanos refrenden, o no, la postura del gobierno.
Hace una semana, el ente electoral anunció las cinco preguntas que responderán los ciudadanos en la consulta sobre la disputa territorial con Guyana, promovido por la Asamblea Nacional, entre ellas la posibilidad de crear un estado para anexionarse la Guayana Esequiba.
Además, se consultará si los venezolanos rechazan «la línea impuesta fraudulentamente por el laudo arbitral de París de 1899», en la que Guyana sustenta su reclamo, y se buscará legitimar la defensa del Acuerdo de Ginebra, que es el mecanismo que valida Venezuela para resolver la disputa.
El Acuerdo de Ginebra contempla que las partes deben resolver de forma satisfactoria, práctica y amistosa la controversia territorial.
Por el momento, ninguna de las partes planteó la opción de que sean los propios esequibanos, que rondan los 125.000, los que decidan sobre su pertenencia a uno u otro país, o elijan mantenerse como territorio independiente y soberano.