«Con gran orgullo informamos que volvió Chávez y Bolívar a la misión diplomática de Venezuela en Bolivia. ¡No volverán!», fueron las palabras de Jorge Arreaza, canciller del régimen de Nicolás Maduro, quien este lunes 9 de noviembre tomó control del edificio que funciona como sede de la Embajada de Venezuela en ese país, tras la toma de posesión del nuevo presidente izquierdista, Luis Arce.
«Cargados con el amor del comandante Chávez por el pueblo boliviano, Venezuela recupera su Embajada en Bolivia y devuelve a su lugar de origen el emblemático cuadro del comandante, recuperado por los diplomáticos en el momento del golpe de Estado», escribió en su cuenta de Twitter el funcionario chavista.
Antes, Arreaza, descolgó de la pared un cuadro del presidente encargado de Venezuela, Juan Guaidó, quien fue reconocido como legítimo mandatario del país por la jefe de Estado interina, Jeanine Áñez Chávez.
«Con un nuevo gobierno auguramos mejores relaciones que se traduzcan en bienestar de nuestros pueblos», escribió Arce en el mencionado medio social, donde el militante del Movimiento al Socialismo (MAS) afirmó que en «Bolivia inicia un nuevo tiempo».
BOLÍVAR ESTUVO PRESENTE
Durante la ocupación de la representación del presidente interino venezolano, el cuadro de El Libertador Simón Bolívar también estuvo colgado en la oficina, así se muestra en una fotografía que rápidamente fue difundida en las redes sociales.