En Venezuela no solo ha cambiado la economía, la manera de vivir y la actitud de cada venezolano ante la situación. Ya no solo es “rebuscarse” la vida, sino tratar de sobrevivir en medio de la miseria. Los que antes decían “yo jamás haré cola” ahora no han tenido de otra que preguntar qué día les toca.
Aquí les presentamos seis diferencias entre los venezolanos de antes y los de ahora:
1. Regalos de viaje
Antes, lo típico era que nuestros amigos o familia que viajaban al exterior nos trajeran chocolates o cualquier otra chuchería. No nos cansábamos de pedir cereales y brownies. Ahora preferimos que nos traigan al menos un desodorante, jabón o hasta pasta de dientes.
2. Terminal de cédula para comprar
¿Quién diría que en pleno siglo XXI estaríamos yendo al mercado según nuestro número de cédula? Para nada, para que al final, al llegar al final de la cola te digan que todo se terminó o que solo hay un producto: Azúcar ¿Qué almuerzo se hace con azúcar?
3. Anotarse en lista para cita médica
Ir al médico o urgencias en un hospital jamás fue tan difícil como en la actualidad. No importa si llegas desmayándote al Clínico Universitario, lo primero que tendrás que hacer es anotarte en una lista y seguidamente sentarte a esperar que te llamen.
4. Cortes de luz a diario
A parte del “No hay”, la frase más común en Venezuela es “Se fue la luz”. No importa la hora, el momento, si es entre semana o fin de la jornada. El corte eléctrico puede llegarte cuando menos lo esperas y no hay queja que valga.
5. Cero vacaciones
Eso de irse de vacaciones en diciembre o enero, así sea para Margarita, Maracaibo o Punto Fijo, se acabó. El dinero no da para disfrutar unas vacaciones. Todo se redujo a las reuniones en casa en la que cada quien tiene que traer lo que va a consumir porque no hay nada para brindar.
6. Cambios de hábitos alimenticios
Antes, hacer mercado era todo un ritual. Las familias reservaban el domingo para ello. Se podía escoger entre diversas marcas (los menos de 18 no creerían esto), pero sí, hubo una Venezuela antes de esta tragedia. Ahora, toca tomar lo que hay, si hay solo mango, por ejemplo pues solo eso será.