La reciente destitución del ministro de Energía Eléctrica, Luis Motta Domínguez no sorprendió a muchos ya que, ante las constantes fallas en el sistema eléctrico, era algo que se esperaba desde hace mucho.
Sin embargo, el cambio del despacho no había estado entre las prioridades de Nicolás Maduro, por lo menos hasta el pasado mes de marzo, así lo reveló el periodista Nelsón Bocaranda.
De acuerdo con el comunicador, la salida no se había efectuado porque el exfuncionario tenía «dolientes» dentro del régimen. No obstante, los apagones generales registrados en el último mes pusieron en jaque su permanencia.
Ante esto, la solución fue enviarlo a «tomarse un descanso» ya que ahora tampoco cuenta con embajadas para designarle una a Domínguez.
“Ya no hay embajadas que ofrecer, sino solamente los países del ALBA (Alianza Bolivariana para los Pueblos de Nuestra América), Rusia, Bielorrusia, Bolivia, Nicaragua y otros socios en los guisos rojos rojitos”, detalló el periodista en uno de sus Runrunes.