La validación de las firmas para activar el referendo revocatorio ha marchado dentro de los parámetros normales. Voceros de la oposición venezolana han denuncia retardo intencional por parte del Consejo Nacional Electoral (CNE), además, varios ciudadanos se han quejado de que mediante varios intentos se les ha hecho imposible cumplir con este paso.
Entre los casos conocidos, resalta el de María Mariño quien ha intentado durante los primeros tres días de la semana confirmar su rúbrica. La mujer, quien vive en el barrio Santa Cruz del Este, intentó consumar el proceso en La Boyera y en Barlovento pero por distintas dificultades no lo logró.
“Estábamos muy animados, pero cuando llegamos a Barlovento 50 personas nos quedamos en la cola sin poder validar la firma. Aunque 22 personas que viajaron conmigo en el autobús, mi amiga y yo fuimos parte de las 10 que se quedaron sin validar. Sin embargo, aquí estoy. Hoy pagué un libre para tratar de validar y si hoy ni mañana logro validar, volveré el viernes para lograrlo. Hay que validar”, manifestó.
En otro caso, debido a las responsabilidades diarias Marisabel Díaz no ha podido llegar temprano para hacer la cola pues debe llevar a su hijo para el colegio: “El lunes llegué a las 10:00 am y quedé muy atrás. El martes llegué a las 8:00 am y hoy miércoles, aunque llegué a las 7:00 am, es probable que no pueda validar porque aún estoy muy atrás. Si hoy no valido, mañana no llevaré a mi hijo para el colegio”, según reseñó El Pitazo.
En las colas, describe un ambiente de entusiasmo, esperanza y camaradería. Las personas comparten las chucherías que llevan para aguantar las horas de hambre, las largas colas, lluvia, sol y cansancio.