El pasado 8 de abril, la ONG Control Ciudadano se pronunció para exigir «transparencia» en el proceso para tramitar la nueva cédula de identidad y que será dirigido por el Servicio Administrativo de Identificación, Migración y Extranjería (Saime).
«El derecho a obtener documento público que compruebe la identidad es un derecho humano garantizado por la Constitución de la República Bolivariana de Venezuela en su artículo 56 (…). Sin embargo, el derecho a la obtención de la cédula de identidad y del pasaporte para los venezolanos se encuentra seriamente limitado en la actualidad, por una serie de obstáculos administrativos engorrosos que han propiciado la corrupción», alertaron, en una nota publicidad en su página web.
Del mismo modo, precisamente, en aras de la transparencia, la ONG consideró que es necesario que el Saime explique cuál es la situación actual de la cual se parte: cuántos cedulados hay en el país y en qué estado se encuentra el respaldo de estos datos.
El director del Saime, Gustavo Vizcaíno, declaró que la nueva cédula identidad está avanzada y que mostrará más datos que el actual documento. Además de la fotografía, nombres y apellidos; fecha de nacimiento y número de cédula; también contendría huellas de ambos pulgares; impresión del domicilio y tipo de sangre del portador. Se evalúa además si se le incorpora un chip, código QR o un código de barra.
Se espera que tenga una duración de 10 años más que el actual documento, por lo que expirará 20 años después de su emisión.
Redacción Maduradas con información de Control Ciudadano
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