La Administración de Barack Obama está dispuesta a trabajar con el senador republicano Marco Rubio y otros legisladores para analizar un proyecto de ley que ampliaría las sanciones a Venezuela, aseguró este miércoles uno de los principales asesores en política exterior del mandatario, Anthony Blinken.
En una audiencia en el Senado, el asesor adjunto de seguridad nacional de Obama afirmó que la Casa Blanca ha estado centrada en los últimos meses en “ver si nuestros aliados en Latinoamérica podían lograr resultados” para aliviar las tensiones en Venezuela desde las protestas que comenzaron en febrero.
No obstante, reconoció que esos esfuerzos para “sacar a opositores de la cárcel” y fomentar el diálogo entre el gobierno de Nicolás Maduro y la oposición “no han tenido frutos por ahora”. Por tanto, la Administración está dispuesta a trabajar con Rubio “en las medidas que ha estado proponiendo”, que ampliarían las sanciones a Venezuela, aseguró Blinken, nominado por Obama para convertirse en el “número dos” del Departamento de Estado de Estados Unidos.
“Tanto si soy confirmado para el puesto como si no, estoy abierto a tener esa conversación para trabajar con usted en eso. Es algo que deberíamos hacer”, dijo Blinken en respuesta a las preguntas de Rubio durante la audiencia en el Comité de Relaciones Exteriores de Estados Ynidos.
Tras meses de presión por parte de los congresistas, a finales de julio Estados Unidos prohibió la entrada a ciertos funcionarios del gobierno de Venezuela presuntamente vinculados con la violación de derechos humanos. No obstante, varios legisladores insisten en la necesidad de medidas más drásticas, como las contenidas en el proyecto de ley que Rubio presentó en marzo junto con los senadores demócratas Robert Menéndez y Bill Nelson.
Ese proyecto solicita a Obama que congele los activos de las personas involucradas en la represión de las protestas en las calles de Caracas, además de la revocación de los visados a una lista de individuos propuesta por los legisladores. La llamada “Ley para la Defensa de los Derechos Humanos y Sociedad Civil de Venezuela”, contempla una ayuda de 15 millones de dólares para la defensa de los derechos humanos en Venezuela, la protección de los medios de comunicación independientes y el fortalecimiento de la sociedad civil.
En una visita a Colombia la semana pasada, Rubio aseguró que pedirá más sanciones contra Venezuela en el nuevo Senado de mayoría republicana, que tomará posesión en enero. Entre ellas hay algunas dirigidas a “altos funcionarios de la Guardia Nacional y del gobierno” por su supuesta represión en las protestas.
El Gobierno de Obama ha optado por dar espacio al diálogo entre el Ejecutivo y la oposición para resolver las tensiones por las protestas en Venezuela, y el secretario de Estado de Estados Unidos, John Kerry, advirtió en marzo que imponer cualquier sanción es delicado por la “fragilidad de la economía” venezolana. De ser confirmado por el pleno del Senado, en una votación que está prevista antes de que acabe el año, Blinken se convertirá en el subsecretario de Estado de Estados Unidos, el “número dos” de Kerry.
EFE