Otra noticia impacta al mundo en este movido mes de enero. El príncipe Enrique y su esposa Meghan anunciaron este miércoles que trabajarán para ser económicamente independientes y que renunciarán a su rol como miembros sénior de la familia real.
Ademas, informaron en un comunicado que dividirán su tiempo entre el Reino Unido y Norteamérica.
“Después de muchos meses de reflexión y discusiones internas, hemos elegido hacer una transición este año para comenzar a forjar un nuevo papel progresivo dentro de esta institución. Tenemos la intención de dar un paso atrás como miembros ‘sénior’ de la Familia Real y trabajar para ser financieramente independientes, sin dejar de apoyar plenamente a Su Majestad la Reina”, dice el comunicado que la pareja publicó en Instagram.
Comentaron que el apoyo de sus fanáticos les hizo tomar la decisión:
“Es con el apoyo de ustedes, particularmente en los últimos años, que nos sentimos preparados para hacer este ajuste. Ahora planeamos equilibrar nuestro tiempo entre el Reino Unido y América del Norte, continuando honrando nuestro deber hacia La Reina, la Commonwealth y nuestros patronazgos. Este equilibrio geográfico nos permitirá criar a nuestro hijo con una apreciación de la tradición real en la que nació, al tiempo que brinda a nuestra familia el espacio para centrarse en el próximo capítulo, incluido el lanzamiento de nuestra nueva entidad caritativa”, añaden.