Blanca Eekhout, ministra para la mujer, justificó la reubicación arbitraria de centros de votación, ordenada por el Consejo Nacional Electoral (CNE), como un «acto de justicia».
«Una de las decisiones que además fue anunciada previamente por el CNE, un poder autónomo, independiente, fue que aquellos centros donde se den situación de violencia serán cerrados y cambiado», dijo.
Durante una entrevista concedida a VTV, Eekhout sostuvo: «Es un acto de justicia y es un acto de derecho (…) Lo que está haciendo el CNE es garantizar un derecho e impedir que la violencia se convierta en una práctica permanente en nuestro país para impedir la democracia”.
Para Eekhout, los centros de votaciones que fueron cerrados y reubicados no pueden seguir operando, puesto que a su juicio se prestaron para acciones violentas por las que el CNE tuvo que tomar estas medidas.
“Son pocos centros los que han sido reubicados y tampoco son los de mayor densidad poblacional, así que cualquier intento de desacreditar el proceso por esta vía es una falacia, no tiene nada que ver con la realidad”, finalizó.
Redacción Maduradas con información de Noticiero Digital
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