La firma de lujo Balenciaga generó polémica por el lanzamiento de su última campaña de ropa infantil.
La marca de moda que cuenta con Demma Gvasalia cómo director creativo compartió las imágenes de dos niños que sostienen peluches que algunos asocian con accesorios de sadomasoquismo.
Muchos pensaron inicialmente que era una broma, mientras que otros consideraron que la campaña era espeluznante e incorrecta.
Esta campaña promueve los regalos de la marca que incluyen desde tazas de café hasta arnés para perros.