La Unidad de Delincuencia Fiscal (Udef) de la Policía Nacional de España inició una investigación contra el empresario venezolano Alejandro Betancourt por presunto blanqueo de capitales.
De acuerdo con lo reseñado por El Mundo de España, Betancourt es el principal inversor de la firma de lentes alicantina Hawkers y socio del español Alberto Cortina en el grupo financiero DBK Financial Group.
La información se dio a conocer por fuentes especializadas en operaciones inmobiliarias efectuadas en España, basadas en contratos adjudicados por Pdvsa a la sociedad de construcción de plantas termoeléctricas Derwick Associates de Venezuela, ligadas a Betancourt y a su primo Pedro Trebbau.
Betancourt es vinculado a movimientos de dinero de procedencia presuntamente ilícita, que entraron y salieron de cuentas bancarias españolas a través de transferencias, cheques y reintegros en efectivo, a través de la compra de inmuebles.
El empresario venezolano habría pagado unos 22,8 millones de euros por una finca conocida como Castillo de El Alamín, ubicada en Santa Cruz del Retamar (Toledo) siendo una de las primeras inversiones inmobiliarias que hizo en el país ibérico.
El intermediario de Betancourt para la compra fue Miguel Palomo Danko, hijo del fallecido torero Sebastián Palomo Linares. Miguel Palomo cobró 806.940 euros de comisión.
Reseña el rotativo que Betancourt pertenece al grupo de empresarios de jóvenes, de entre 35 y 40 años, que consiguió una fortuna entre 2009 y 2011 gracias a contratos adjudicados por el Gobierno del fallecido Hugo Chávez.
Foto: El Mundo
Redacción Maduradas con información de El Mundo de España
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