La crisis en Venezuela es evidente. Desde el exterior se observa con preocupación la situación en el país, pese a que el Gobierno de Nicolás Maduro se empeña en decir que todo es «normal».
Argentina y Brasil apostaron ayer por que Venezuela halle un «camino de conciliación» en su situación y coincidieron en la necesidad de dotar de mayor dinamismo al relacionamiento externo del Mercosur, en particular en la concreción del acuerdo comercial que se negocia con la Unión Europea.
«Venezuela está en una situación crítica«, consideró ante la prensa en Buenos Aires el nuevo canciller brasileño, José Serra, que eligió Argentina para realizar su primer viaje al exterior desde que Michel Temer asumió la Presidencia interina de su país, mientras Dilma Rousseff es sometida a un juicio político en el Senado.
En una «provechosa visita», según sus palabras, en la capital argentina mantuvo encuentros, entre otros, con el presidente Mauricio Macri -del que no trascendió lo conversado-, y su homóloga, Susana Malcorra, con quien firmó un memorándum de entendimiento para la creación de un Mecanismo de Coordinación Política Bilateral.
Uno de los asuntos tratados por ambos cancilleres, y que asumieron como un «hecho relevante para América Latina», según Serra, fue la crisis en la que se encuentra Venezuela.
«Estamos atentos. Tenemos intereses Brasil y Argentina en que pueda haber una mediación», puntualizó, para señalar que ambos países apoyan tentativas para encontrar un «camino de conciliación» realizadas por figuras como el papa y el expresidente del Gobierno español José Luis Rodríguez Zapatero, reseña EFE citada por Terra.
Sin embargo, la relación bilateral y el estado en el que se encuentra el Mercosur, al que Argentina, Brasil y Venezuela pertenecen junto a Paraguay y Uruguay, resultaron los pilares fundamentales del encuentro.