En medio del repudio y la ola de protestas que generó el anuncio de su visita a México, a la ceremonia de investidura de Andrés Manuel López Obrador, el presidente Nicolás Maduro canceló a última hora su asistencia a la ceremonia, que tiene lugar en el Congreso de la Unión, en la capital mexicana. Así lo publicó Infobae.
Según las autoridades diplomáticas en México, Maduro habría cambiado su hora de llegada a ese país, por lo que no está previsto que asista a la toma de posesión.
Cuando al canciller mexicano, Marcelo Ebrad, le preguntaron si estaba confirmado que Maduro asistiera a la investidura, solo respondió: «Está confirmado que viene hacia México».
El periodista Nelson Bocaranda maneja una versión similar, a juzgar por lo que publicó en su cuenta de Twitter:
«Un exministro de Chávez me informa que Maduro llegó a un acuerdo con López Obrador: no ira a la toma de posesión en el Congreso de México sino solamente al almuerzo presidencial con invitados. Las protestas en la calle están activas».
El repudio le da «la bienvenida»
Desde que Maduro informó de su visita a México, hace días, se veía venir la polémica y el rechazo. En ese país, que ha recibido a una gran cantidad de migrantes venezolanos, el repudio hacia el mandatario venezolano, es real y palpable, por lo que este 1 de diciembre, desde primera hora, la capital mexicana fue escenario de protestas.
Mientras venezolanos marchaban en contra de la presencia de Maduro en México, en el Congreso de ese país, la bancada del Partido Acción Nacional (PAN) erigió una pancarta que le anunciaba a Maduro «no eres bienvenido».