El padre de las hermanas Sofía y Sara Oviedo Quintana, quienes habían desaparecido en Ecuador, negó este miércoles 28 de abril que haya abusado o maltratado a las adolescentes, de 12 y 13 años de edad.
En una entrevista con el periodista Sergio Novelli, para el canal digital VPI TV, Joel Oviedo y Misbelia Quintana aseguraron que en su familia no hay violencia, pero sí afirmaron que aplican las correcciones.
«Somos unas personas que vamos a una iglesia cristiana, yo busco de Dios. Nosotros somos una familia muy trabajadora. Pueden decir que Joel viola a sus hijas. Dios mío, ¿qué más quieres? Ahora parece que el pueblo venezolano quería que le sucediera algo a las niñas. ¿El pueblo venezolano quiere que les pase algo?», dijeron.
«Como padres normalmente corregimos a nuestros hijos, tenemos reglas en casa; si mis hijas hacen algo que no está bien, se corrige. Pero fuera de ahí, para hablar de maltratos, ya ellas hubiesen ido a la policía. Hay todavía un rompecabezas aquí», agregó Oviedo.
Lamentó los comentarios que han surgido en los últimos días en las redes sociales, en los que lo acusan de presuntamente maltratar y de abusar sexualmente de sus hijas, quienes salieron por cuenta propia del hogar.
«Soy su papá, ‘tú eres un pedófilo, que tú las violas’. Dios mío, si sucediera todo eso no estuviera muy bien aquí en Ecuador, no tuvieran mis hijas todo. Sé cómo soy, puedo brindar tranquilamente información sin ningún temor a las autoridades», dijo y pidió a las autoridades encargadas del caso adelantar el proceso porque, afirmó, hay un bombardeo en su contra.
«Tengo paz en mi corazón, si a Jesucristo, aun cuando lo crucificaron, le tiraban piedras, ¿qué esperamos de nosotros?», expresó.
Las menores, que tienen tres años viviendo en Ecuador, se reencontraron con sus padres el lunes 26 de abril, luego de que las localizaron en una zona de Perú, con bolsos y sin ningún acompañante adulto.
En días pasados, Novelli leyó durante su programa Al día con Sergio un acta policial de Perú en el que se estableció que, presuntamente, Sofía y Sara huyeron de su casa por problemas de índole familiar, que involucraría un agravio por parte de sus padres.