En Venezuela no solo se hacen largas colas para comprar alimentos y productos básicos en los supermercados, hasta en abastos y panaderías han empezado a surgir las colas para optar por los productos disponibles en el momento.
Antes, comprar pan era algo tan sencillo como ir hasta la panadería más cercana y ordenar la cantidad de panes que uno quisiera, incluso uno aprovechaba de picar la punta de un pan mientras también nos traían el queso, el jamón y el jugo.
Ahora, cuando llega el pan a las panaderías, llegan las colas, y es que son pocos los establecimientos que tienen este producto debido a la escasez de harina de trigo en el país.
En muchas panaderías han optado por vender un pan campesino o canilla por persona, y si es pan francés el límite serían 4 unidades, al mejor estilo cubano.