El grupo hacktivista Anonymous lanzó esta semana una campaña de hackeo contra las autoridades de Irán tras la muerte de la joven Mahsa Amini, quien murió bajo custodia tras ser detenida por usar mal su velo.
La muerte de Amini desató una ola de protestas. Las mujeres salieron en masa a quemar sus velos en público y, progresivamente, otros sectores de la sociedad se sumaron a las manifestaciones para exigir derechos y libetad.
Desde el pasado 21 de septiembre, el grupo de hacktivistas Spid3r, afiliado a Irán, tuitea constantemente capturas de pantalla de su operación de hackeo con #OPIran.
En ellas, se incluían muchos sitios del gobierno iraní, entre los que se encuentran el Banco Central de Irán, la agencia de noticias Fars, el centro de investigación forense de Irán y muchos más.
El grupo emprendió ataques DDoS contra estas instituciones estatales iraníes. Los dominios de los sitios mencionados quedaron parcialmente fuera de línea.
Anonymous también refirió en un trino que apoya las mujeres de Irán en su lucha contra un «régimen brutal».
En un tuit posterior, le explicaron a los ciudadanos la importancia de utilizar una VPN tras conocerse el bloqueo de las redes sociales.
Además, recomendaron a los iraníes formas más seguras de protestar, como cubrirse adecuadamente la cara para evitar ser reconocido y capturado.
«Entendemos el abuso que sufren, y haremos todo lo posible para ayudar al pueblo de Irán en la medida en que podamos. Muchos hacktivistas de todo el mundo apoyan al pueblo de Irán y entienden lo represivo que es su gobierno», agregaron.
Redacción Maduradas
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